Si bien no podemos controlar el proceso de envejecimiento, ciertamente podemos retrasarlo al garantizar la ingesta de los nutrientes que nuestro cuerpo necesita para reducir el daño y apoyar la reaparición de los tejidos.
Uno de esos nutrientes es el Zinc, considerado un mineral vital para el organismo cuya función es ser el catalizador de diversas reacciones esenciales para el cuerpo humano.
Las propiedades de este mineral son diversas:
- Mejora el sistema inmunológico.
- Fortalece las membranas celulares.
- Actúa como antioxidante y es esencial para la formación de colágeno, disminuyendo el riesgo de enfermedades relacionadas con la edad.
- Previene la formación de arrugas a nivel molecular.
- Favorece la fijación de calcio en los huesos.
- Mantiene el sistema metabólico e interviene en la función tiroidea.
- Ayuda a la producción de espermatozoides y a bajar la inflamación de la próstata.
- Esencial en el crecimiento de los niños.
- Promueve la curación de heridas. Reduce la inflamación.
- Está presente en la producción de melatonina y dopamina, determinantes para un buen descanso, mejorar el estado de ánimo y las funciones cognitivas.
- Regula los procesos de coagulación y la azúcar en sangre.
La deficiencia de zinc puede desencadenar en el envejecimiento y en enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, tiroides y cáncer. Conducir a un sistema inmunológico debilitado y al aumento de la inflamación.
Señales que indican puedes estar bajo en zinc:
- Tu sistema inmune es frágil.
- No duermes lo suficiente.
- Pérdida del apetito y de peso sin razón aparente.
- Tienes poco deseo sexual o estado de ánimo bajo.
- Tus encías sangran fácilmente.
- Falta del gusto y el olfato ( fuera del Covid-19)
Es importante saber que el consumo excesivo de este mineral es perjudicial. Puedes presentar náuseas, vómitos, diarreas, dolores de cabeza, pérdida del apetito, nivel deficiente de cobre, poca inmunidad y bajos niveles del colesterol bueno HDL.
La cantidad diaria de Zinc que se necesita depende de la edad. En adultos la dosis máxima recomendada es de 40mg.
Se consigue a través de suplementos y consumiendo ostras, carnes, mariscos como cangrejo y langosta, cereales integrales, frijoles y frutos secos y semillas.
Te recomiendo te realices periódicamente una evaluación de tu nivel de Zinc y que lo consumas según la cantidad que necesites.
Si quieres más información y un acompañamiento cercano me puedes escribir y con gusto te estaré ayudando a través de una evaluación y recomendaciones terapeuticas basada en tus necesidades.
Con amor, Pamela Bernal, NL.
La Naturista