Durante la temporada de virus respiratorios muchas personas se sienten congestionadas, con flema constante o presión en los senos paranasales. Aunque parece algo típico del clima, hay un factor oculto que muy pocos consideran: el estado de tu sistema digestivo. Llegué a esta conclusión no solo por conocimiento naturopático sino por experiencia propia. Cuando me di cuenta que mi reacción a una gripe produjo más mucosidad y flema tiempo después de haber tomado un tratamiento con antibióticos que cambio por completo la ácidez de mi estómago.
El ácido estomacal no solo sirve para digerir alimentos. También es una de las primeras defensas del cuerpo ante virus y bacterias. Cuando los niveles de ácido están bajos (algo común en personas con estrés, dietas pobres o uso frecuente de antiácidos), el cuerpo queda más vulnerable a infecciones.
Además, una digestión lenta o débil genera fermentación, toxinas y acumulación de desechos. ¿Cómo responde el cuerpo? Activando mecanismos de defensa como la producción de mucosidad. Así es como muchas personas terminan con flema, sinusitis, o congestión… aunque el origen esté en el estómago, no en los pulmones.
Alimentos que empeoran la mucosidad:
- Lácteos
- Azúcar
- Harinas refinadas
- Alimentos procesados
Alimentos y prácticas que la reducen:
- Jengibre, cúrcuma, piña, rábano
- Enzimas digestivas y probióticos
- Amargos naturales antes de comer
- Respirar profundo, masticar bien y comer con calma
¿Cómo saber si necesitas un reset digestivo?
Si tienes síntomas como:
- Flema crónica
- Sinusitis frecuente
- Inflamación abdominal
- Digestión lenta
- Fatiga constante
… tu cuerpo podría estar pidiendo una limpieza interna.
En nuestros programas Detox de 1, 3 y 12 días, no solo ayudan a tu cuerpo a eliminar toxinas. También reeducas tu digestión, reduces la mucosidad y refuerzas tus defensas desde adentro.
¿Lista para respirar mejor desde tu estómago?
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Con amor y consciencia,
Pamela Bernal, NL
