Una de las quejas más comunes en la mayoría de las mujeres en su etapa reproductiva es el dolor menstrual. Conocido medicamente como dismenorrea, el dolor menstrual se caracteriza por calambre, ardor o dolor intenso que aparece un días u horas antes o durante la llegada de la menstruación. Aunque la menstruación corresponde al desprendimiento del tejido del endometrio y esto puede provocar molestia. El dolor menstrual incapacitante y acompañado de síntomas como náuseas, vómitos, dolor de cabeza o quemazón, no debe ser normal.
El dolor menstrual según la literatura se clasifica en dos formas: dismenorrea primaria o secundaria. En la dismenorrea secundaria el dolor menstrual está directamente relacionado con condiciones como: quistes, fibromas, endometriosis o la posición anormal del útero. En la dismenorrea primaria la causa del dolor menstrual no está directamente relacionada a una condición diagnosticada, y la raíz de este último esta mayormente ligada a los procesos inflamatorios. Los procesos inflamatorios pueden desencadenarse debido a diferentes factores proinflamatorios como la alimentación, el exceso de toxinas endocrino-disruptivas, el exceso de cortisol o también los espasmos musculares debido a deficiencias minerales. Aunque poco común, también existe el dolor menstrual psicosomático, donde según la biodescodificación emocional, este está ligado a conflictos de rechazo consciente o inconsciente de la idea o concepto de lo femenino.
Para tratar la raíz de los factores que provocan ambos tipos de dismenorrea, desde la naturopatía, es importante hacer cambios significativos en la alimentación y estilo de vida. No obstante algunas alternativas naturales conocidas en la literatura ancestral y también con revisión científica, pueden servir como remedio para aliviar el dolor.
Múltiples estudios muestran que la semilla de hinojo es un tratamiento eficaz y seguro que funciona tan bien como, o incluso mejor, que muchos medicamentos de venta libre para el dolor menstrual, pero sin agregar efectos secundarios dañinos como sarpullido, diarrea, anemia, reacciones autoinmunes e insuficiencia renal. Las semillas de hinojo de pueden masticar o usar para hacer una infusión que idealmente debe tomarse a temperatura tibia o caliente.
- Magnesio
En los estudios, las mujeres han encontrado alivio no solo del dolor relacionado con el síndrome premenstrual, como calambres y dolores de cabeza, sino también de la tensión nerviosa, el dolor en los senos e incluso los antojos de azúcar al tomar magnesio de forma regular. Puedes encontrar magnesio en alimentos como verduras de hoja verde, nueces, semillas de calabaza, aguacates, chocolate negro y frijoles negros, además de suplementos como el magnesio citrato. También el cloruro de magnesio aplicado de forma tópica.
- Aceites esenciales
Un estudio que analizó el uso de aceites esenciales en el masaje abdominal encontró que el grupo que recibió un masaje con una mezcla de aceites de clavo, canela, rosa y lavanda en una base de aceite portador de almendras notó un alivio significativamente mayor de los cólicos menstruales que el grupo que usó el aceite de almendras portador solo. Se puede hacer una mezcla de estos aceites esenciales y aplicarlo de forma tópica en el vientre.
- Movimiento
Muchas mujeres descubren que dar un paseo suave, hacer algo de yoga o incluso un poco de estiramiento pueden marcar la diferencia. De hecho, un estudio en Taiwán encontró que las clases de yoga dos veces por semana condujeron a una reducción de los dolores menstruales después de sólo 12 semanas. Puede parecer raro, ya que cuando hay dolor evitaríamos el movimiento. Sin embargo, cuando el dolor menstrual es por estancamiento de energía o falta de circulación en el vientre bajo, el movimiento es el remedio ideal.
- Calor
Una almohadilla térmica o una botella de agua caliente en el abdomen pueden relajar los músculos, como el músculo uterino, lo que brinda un alivio muy necesario para los calambres y otras molestias. Si también tiene dolor de espalda, el calor también puede ayudar allí. También puede considerar un baño tibio para relajar los músculos de todo el cuerpo a la vez. A este baño puede agregar sales Epson para exaltar los beneficios.
La inflamación crónica es la principal causa del dolor menstrual en la mayoría de las mujeres. Si bien estas alternativas pueden ayudarte a aliviar el dolor este puede volver a aparecer una y otra vez sino trabajas con la raíz. En una consulta se puede identificar cuales factores son necesario corregir de forma individual. Es importante entender que la raíz de la inflamación se trabaja con cambios en la alimentación y el estilo de vida, incluyendo los factores emocionales.
Si padeces de fuertes dolores menstruales como yo una vez padecí, escríbeme para apoyarte mejor a través de una consulta inicial.
Con amor y consciencia,
Pamela Bernal, NL
