Por mucho tiempo hemos escuchado que salir al aire libre y estar en contacto con la tierra es nutritivo para la mente, el cuerpo y el alma, ya que permite que las personas se sientan en armonía con la naturaleza y el mundo.
En la actualidad, se sabe que, la conexión con la tierra ayuda a aumentar el flujo sanguíneo y es efectiva para aquellos que buscan formas de reducir la inflamación que puede conducir al desarrollo de enfermedades crónicas como el cáncer y la artritis.
Sabiendo esto podemos afirmar que ponernos en contacto con la tierra es una forma ideal de optimizar la salud física y mental en general.
Los pioneros en el concepto sostienen que los electrones de la tierra ayudan a neutralizar los radicales libres y, al usar el cuerpo como conducto, es posible que esa energía beneficiosa se transfiera directamente a un individuo.
Se recomienda eliminar las barreras que dificultan este proceso (zapatos, guantes de jardinería o cualquier otro elemento aislante) y, en su lugar, participar en actividades como caminar descalzo sobre el césped o la playa hasta 30 minutos al día, o trabajar en el jardín (con cuidado) con las manos desnudas.
Para aquellos que no pueden participar en tales actividades, las tecnologías de conexión a tierra como láminas, sandalias y fundas para asientos de automóviles sirven para lograr los mismos o similares objetivos.
Los estudios han demostrado que conectarse con la tierra de esta manera ayuda a:
- Aumentar la energía.
- Mejorar el sistema inmunológico.
- Promover una curación más rápida.
- Reducir el estrés.
- Aumentar tu concentración.
- Estimular la creatividad.
- Fortalecer la autoestima.
La investigación publicada en el Journal of Alternative and Complementary Medicine ha relacionado la puesta a tierra con la capacidad de resincronizar la secreción de cortisol para que esté más equilibrada con su ritmo normal. El cortisol también se conoce como la hormona del estrés.
A quitarse los tacones y conectar mas con la tierra para lograr tu balance femenino.
Con amor y consciencia
Pamela Bernal, NL
La Naturista